Para el proyecto de Iluminación del Templo Expiatorio a Cristo Rey, Antigua Basílica de Guadalupe, se planteó un diseño que evocara el esplendor que caracterizó por cientos de años al Santuario.
Para la iluminación exterior se contempló una pincelada general, para lo cual se empotraron en piso luminarias y se colocaron proyectores en poste que matizaran la parte superior del cuerpo principal.
Por la escala y puntos preferentes de observación detectados, las torres, cúpulas y accesos fueron el reto más importante ya que eran los elementos principales a destacar, colocando luminarias lineales sobre dichos elementos matizándolos con proyectores de menor potencia.
La tecnología propuesta fue mediante el uso de LEDs y lámparas de aditivos metálicos, remplazando una cantidad similar a la de lámparas halógenas que son aprovechadas para resaltar elementos con otra tonalidad de luz.
Los baños de luz general para el edificio y para la cúpula fueron realizados con proyectores que gracias a su óptica genera un efecto homogéneo.